Este estudio aborda el empleo juvenil marcado por un contexto de crisis económica que truncó las expectativas y aspiraciones de muchas y muchos jóvenes, enfrentando situaciones de precariedad laboral, cuando no de desempleo que, aunque se comienza a identificar una mejoría, no deja de ser un problema público.
Mediante el método Delphi, proyectado a 5 años, se han ido construyendo consensos entre las y los expertos resaltando la previsión de una mejora de la situación económica en España, pero que irá acompañada de un aumento de la brecha social y otros elementos de precariedad en la inserción laboral de las y los jóvenes, así como el crecimiento de las fórmulas de inserción como contratos en prácticas o de formación y aprendizaje, enmarcadas en un interés por los poderes públicos para fomentar su buen uso. Desde las empresas (muestra de responsables de recursos humanos de organizaciones líderes en España) se pone de manifiesto una perspectiva también optimista para el mercado laboral, previendo contrataciones en el colectivo joven que priorizan a jóvenes adultos con formación universitaria y demandando perfiles con habilidades específicas (manejo de idiomas, tecnologías y “nuevas profesiones” ligadas al avance tecnológico).
La confrontación y articulación de las visiones de las y los jóvenes, de las y los expertos, así como de la muestra de empresas, es el cierre de esta investigación, poniendo de manifiesto la existencia de conclusiones comunes sobre esta problemática aunque, lógicamente, marcadas desde las diferentes posiciones e intereses de estos actores.
